LOS PITUFOS (2011)
Cuando yo hice el meritoriaje en la productora Balcázar, autores de ese cine "comercial" que tanto detesta la crítica, me decían que a ellos lo único que les interesaba del mundo del cine son unas hojas que distribuye el Ministerio de Cultura donde dicen cuanto dinero recauda cada película y que lo demás son pamplinas. Elucubraciones mentales de críticos con muy pocas luces que no dan de comer a nadie.
Para ellos el cine es claramente un negocio y las películas mercancías. No conocí a Ignacio F. Iquino, pero me llegó una sentencia muy significativa. Al principio de su carrera se dedicó a buscar calidad pero las salas siempre estaban vacías así que para llenarlas llegó a ésta conclusión "si el público quiere mierda hay que darle mierda".
En la actualidad el mencionado director de Valls, autor de los bodrios más infames de nuestra cinematografía pero que fue maestro de numerosos cineastas Made in Catalonia, es lo que se llama "Cineasta de Culto" del que se dicen toda clase de bondades y aquellos que no nos atrae ese cine tan casposo e irritante nos adjudican los insultos más malsonantes del diccionario de la Real Academia de la Lengua.
¿Que porqué digo eso? Pues porque Raja Gosnell, director de la cinta que nos ocupa, está pésimamente valorado por los escritores cinematográficos a quien tratan de torpe, casposo e inepto. Sin embargo sus películas tan despreciadas llenan la sala hasta la bandera.
Tal vez eso se debe a que los personajes de su última obra ya gozan de un prestigio previo, los pitufos creados por Peyo en una aparición episódica en La flauta de los seis pitufos con Jano y Pirluit, pero su éxito fue tan inesperado que crearon un spin off con aventuras independientes llegando a convertirse en leyenda del comic y posteriormente del cine de animación eclipsando a los protagonistas originales de su primera aventura.
Son los pitufos quienes llenan las salas, no el oportunista Raja Gosnell que se aprovecha de un triunfo ajeno para satisfacer una operación comercial sin ningún pudor. Los pitufos son un negocio, no la Capilla Sixtina. Teniendo en cuenta que el público al que va dirigido, el infantil, no se va a calentar mucho el seso con disquisiciones metafísicas, ese ejemplo cumple con su objetivo: llenar de dólares las arcas de las multinacionales de Nueva York. Es curioso que ese público que tanto se lamenta que de nuestros impuestos se subvencionen películas (si lo hacen bien o mal es ya harina de otro costal) calla cuando ese cine recauda fortunas que salen de nuestro país para engrosar el patrimonio de los accionistas capitalistas de dichas empresas y que nuestro país no disfruta. Sólo se quejan del dinero utilizado en subvenciones, dinero que a fin de cuentas se queda en nuestra patria aunque dicha palabra ya no esté de moda.
Nadie se queja de la práctica fraudulenta de las multinacionales que controlan los mercados con métodos poco éticos, impidiendo que nuestras películas y las de otras latitudes lleguen a nuestras salas e imponernos las suyas sin ninguna consideración.
Claro está que muchos "escritores" actuales presumen de frikkies y les importa un bledo lo que estoy contando. Presumen de su falta de conciencia y se creen unos genios por su insolaridad. En resumidas cuentas, es posible que el ya desaparecido Ignacio F. Iquino tuviera bastante razón en su aseveración.
En fin, para qué seguir. Mejor dejarlo porque me pondría de peor humor.
Para ellos el cine es claramente un negocio y las películas mercancías. No conocí a Ignacio F. Iquino, pero me llegó una sentencia muy significativa. Al principio de su carrera se dedicó a buscar calidad pero las salas siempre estaban vacías así que para llenarlas llegó a ésta conclusión "si el público quiere mierda hay que darle mierda".
En la actualidad el mencionado director de Valls, autor de los bodrios más infames de nuestra cinematografía pero que fue maestro de numerosos cineastas Made in Catalonia, es lo que se llama "Cineasta de Culto" del que se dicen toda clase de bondades y aquellos que no nos atrae ese cine tan casposo e irritante nos adjudican los insultos más malsonantes del diccionario de la Real Academia de la Lengua.
¿Que porqué digo eso? Pues porque Raja Gosnell, director de la cinta que nos ocupa, está pésimamente valorado por los escritores cinematográficos a quien tratan de torpe, casposo e inepto. Sin embargo sus películas tan despreciadas llenan la sala hasta la bandera.
Tal vez eso se debe a que los personajes de su última obra ya gozan de un prestigio previo, los pitufos creados por Peyo en una aparición episódica en La flauta de los seis pitufos con Jano y Pirluit, pero su éxito fue tan inesperado que crearon un spin off con aventuras independientes llegando a convertirse en leyenda del comic y posteriormente del cine de animación eclipsando a los protagonistas originales de su primera aventura.
Son los pitufos quienes llenan las salas, no el oportunista Raja Gosnell que se aprovecha de un triunfo ajeno para satisfacer una operación comercial sin ningún pudor. Los pitufos son un negocio, no la Capilla Sixtina. Teniendo en cuenta que el público al que va dirigido, el infantil, no se va a calentar mucho el seso con disquisiciones metafísicas, ese ejemplo cumple con su objetivo: llenar de dólares las arcas de las multinacionales de Nueva York. Es curioso que ese público que tanto se lamenta que de nuestros impuestos se subvencionen películas (si lo hacen bien o mal es ya harina de otro costal) calla cuando ese cine recauda fortunas que salen de nuestro país para engrosar el patrimonio de los accionistas capitalistas de dichas empresas y que nuestro país no disfruta. Sólo se quejan del dinero utilizado en subvenciones, dinero que a fin de cuentas se queda en nuestra patria aunque dicha palabra ya no esté de moda.
Nadie se queja de la práctica fraudulenta de las multinacionales que controlan los mercados con métodos poco éticos, impidiendo que nuestras películas y las de otras latitudes lleguen a nuestras salas e imponernos las suyas sin ninguna consideración.
Claro está que muchos "escritores" actuales presumen de frikkies y les importa un bledo lo que estoy contando. Presumen de su falta de conciencia y se creen unos genios por su insolaridad. En resumidas cuentas, es posible que el ya desaparecido Ignacio F. Iquino tuviera bastante razón en su aseveración.
En fin, para qué seguir. Mejor dejarlo porque me pondría de peor humor.
Título: Los Pitufos
Título original: The Smurfs
País: USA
Estreno en USA: 29/07/2011
Estreno en España: 29/07/2011
Productora: Sony Pictures Animation
Director: Raja Gosnell
Guión: J. David Stem, David N. Weiss, Audrey Wells
Reparto: Neil Patrick Harris, Jayma Mays, Sofia Vergara, Hank Azaria, Anton Yelchin, Jonathan Winters, Katy Perry, Alan Cumming, Fred Armisen, George Lopez, Paul Reubens, John Oliver, Kenan Thompson, B.J. Novak, Jeff Foxworthy, Wolfgang Puck, Gary Basaraba, Tim Gunn
Título original: The Smurfs
País: USA
Estreno en USA: 29/07/2011
Estreno en España: 29/07/2011
Productora: Sony Pictures Animation
Director: Raja Gosnell
Guión: J. David Stem, David N. Weiss, Audrey Wells
Reparto: Neil Patrick Harris, Jayma Mays, Sofia Vergara, Hank Azaria, Anton Yelchin, Jonathan Winters, Katy Perry, Alan Cumming, Fred Armisen, George Lopez, Paul Reubens, John Oliver, Kenan Thompson, B.J. Novak, Jeff Foxworthy, Wolfgang Puck, Gary Basaraba, Tim Gunn
Comentarios