Ir al contenido principal

La vampira de Cantabria

LA GUAJONA
Esta figura siniestra de la mitología cántabra está emparentada con Lamia de la mitología griega. De hecho es llamada asi en ciertas partes pero la que nos ocupa es vieja, fea y muy delgada. Siempre tapada de los pies a la cabeza con un manto negro. Sus manos son negruzcas y espantosas, como toda ella, con tez amarillenta y llena de pelos y verrugas. Sus pies son patas de ave. Naturalmente, como toda hija de la noche, no vive de día y nadie sabe sobre su paradero aunque por lo general se cree que está bajo tierra, escondida, esperando que se ponga el sol para iniciar toda clase de fechorías. Se mueve entre las sombras, sigilosamente entra en las casas sin hacer el menor ruido y con su único diente, muy afilado y largo lo clava en la piel de los niños para beber su sangre fresca que necesita para sobrevivir. Les deja descoloridos y demacrados, no les mata pero les debilita mucho. La Guajona es conocida también como Lamia, figura perteneciente a la mitología griega que tiene la virtud de sacárselos ojos y volverselos a poner a su entera voluntad.
Lamia tuvo varios hijos con Zeus, que le dio esta facultad en pago por sus servicios, pero la celosa Hera los asesinó a excepción de Escila. Por eso la cruel y vengativa madre trataba de desquitarse asesinando a los hijos de las demás mujeres. Se convirtió en un ser de rostro horroroso, se unió a las Empusas y se dedicó a acostarse con jóvenes a los que posteriormente bebía su sangre mientras dormían.
Curiosamente era diosa del amor y de la guerra, conocida también por Anatha y
Atenea.


La Guaxa es la versión asturiana de la Guajona. Esta vez tiene ojos de fuego y es letal porque esta vez causa la muerte. La palabra Guaxa procede del bable, guax, guax, la onomatopoya del ruido de las lechuzas y los búhos. Hemos de recordar que la expresión bruja procede de lechuza. En todo caso estos personajes eran útiles para asustar a los niños traviesos, a los que se amenazaba con llamar a la Guajona si no se portaban como era debido.

Comentarios

Entradas populares de este blog

La detective V. I. Warshawski

DETECTIVE CON MEDIAS DE SEDA (1991) Victoria Iphigenia "Vic" "V. I." Warshawski es un personaje de ficción en una serie de novelas detectivescas e historias cortas escritas por Sara Paretsky. Las novelas transcurren en Chicago, están escritas en primera persona y la describen como una mujer independiente. En 1991 fue llevada al cine con la gran Kathleen Turner pero la crítica la machacó en base de la edad madura de la actriz que entonces contaba sólo con 37 años. Si algún defecto tiene esta película es la mediocridad del equipo creativo y de su realizador, muy rutinario, pero la actriz está espléndida. Respecto a la edad pues aún estaba joven y lozana, al menos para mi gusto. Como escribía don Miguel de Cervantes Saavedra, al que le negaron el talento " porque era viejo ": " nadie puede detener el transcurso del tiempo ". Yo consideré y considero que esa argumentación es de pésimo gusto e improcedente. Leer más:

Enriqueta Martí

ENRIQUETA MARTI Se llama Hematodixia a los vampiros reales, los que están vivos y no pertenecen a las antiguas leyendas. Son gentes que en apariencia es muy normal pero que necesitan sangre para poder vivir (la palabra hemato proviene del latín y quiere decir sangre). En tratad os de vampirismo se les llama así, pero en realidad esconde una anemia perniciosa, falta de Vitamina B12 que es debido a carencias en la sangre y por ello los glóbulos rojos no maduran correctamente. A medida que la enfermedad progresa se producen cambios en la columna vertebral, con gran debilidad, entumecimiento de las piernas, dificultad para respirar, diarreas, vómitos, pérdida de peso, palidez en las mejillas y otros síntomas parecidos a los no muertos de las antiguas leyendas. Fue a partir de 1926 que se descubrió el remedio a esta enfermedad con el suministro de la vitamina B12 y ácidos fólicos, muy concentrados, y que se encuentran en el hígado de algunos animales. Pero hasta que no fue d

El film escándalo

A SERBIAN FILM A Serbian Film pertenece a esa clase de películas que nunca iré a verlas porque no me interesan en absoluto. Sin embargo lo cortés no quita lo valiente y todo el zipizape judicial está fuera de lugar, la censura es inadmisible en un estado democrático sobretodo cuando se amenaza de procesar al equipo directivo del Festival de Sitges por haberla programado. Todo este escándalo en realidad ha supuesto una importante publicidad para una película que a priori carece de interés. El escándalo vende, atrae al público ávido de morbo. En mi caso, como de lo que estoy ávido es de ver buen cine pues dedico mi tiempo a otras producciones que tengan más valores que ésta.